“Yo creo firmemente que el que no se equivoca es porque no está haciendo nada”

Carlos Roberto Daniel Otrino
Director Ejecutivo Mercado de Santa Fe
Secretario de Fenaomfra
Fecha de nacimiento 11-07-1958

Quizá el lugar no es el más indicado porque estamos en medio de una reunión de Fenaomfra. Quizá el clima tampoco porque es un día increíblemente húmedo en la ciudad de Santa Fe (usual para los santafecinos). Quizá no sea el momento indicado pero esos son difíciles de encontrar. A pesar de todo, Carlos Roberto Daniel Otrino se acerca y conversa con nosotros. Y conversa largo y tendido, habla pausado y correcto. Pareciera que siempre tiene las palabras justas (será que el ser  abogado le ha permitido desarrollar el don de la oratoria).

Nacido en Santa Fe, finalizando la década del ´50 –para ser más precisos el 11 de julio de 1958-  durante su infancia Carlos vivió en varias localidades de la provincia que lo vio nacer. “Nos mudamos 19 veces”, cuenta y realiza un repaso por algunas de las ciudades que lo vieron jugar y correr de niño: “Vivimos acá en Santa Fe, después nos mudamos a un pueblito, Hessler, de unos 1300 habitantes con los de la colonia. También vivimos en Carlos Centro y nos mudamos varias veces en la misma ciudad de Santa Fe”.

Carlos es abogado pero su carrera profesional lleva más años cerca del Mercado de Santa Fe que de Tribunales o un estudio jurídico. Su historia con el mercado comenzó así: “Cuando empecé a trabajar en el Mercado, en 1984, me faltaban 8 materias para recibirme de abogado. Estaba por cumplir 26 años fue el 13 de abril de 1984. Llegué al mercado por la familia política. Mi suegro conocido como el polaco Nazaruk, cuando hacía un tiempo que me había puesto de novio un día me dijo: “vamos al mercado”, y lo le dije: “vamos”. Había que ir a las 2 de la mañana (al viejo mercado), la verdad es que es un mundo completamente diferente, me fascinó”, relata Otrino.

me dijo: “vamos al mercado”, y lo le dije: “vamos”. Había que ir a las 2 de la mañana (al viejo mercado), la verdad es que es un mundo completamente diferente, me fascinó”

Y tanto le gustó que allí se quedó un buen tiempo. “En el ´82 me casé y en el ´84 mi suegro me dijo que me postulara como gerente. Presenté mi currículum, no quedé yo sino un amigo que estuvo en la gerencia durante 6 meses, después él renunció y ahí entré. A partir de allí, estuve en la gerencia durante 16 años. Para aprender del mercado, recorrí todos los puestos. Un día estaba en los portones, otro día estaba con los barrenderos, otro día estaba en la playa, con el electricista y así fui aprendiendo el movimiento del mercado que es un mundo muy particular”, explica. Trabajó en el mercado hasta el 2000 cuando, por decisión del Mercado, se desvinculó. En el 2007 regresó al Mercado como síndico y en ese mismo año se convirtió en Director Ejecutivo, puesto que ocupa hasta hoy.

Fruto de su matrimonio con Luba (la hija del polaco Nazaruk) tuvieron tres hijos. El mayor, Ignacio Nicolás, luego Maira Luba y la menor, Sabrina María Constanza. Es por ese lado que viene su mayor sueño. “Mi sueño más grande en la vida es que mis hijos se desarrollen en lo que eligieron. Tengo un hijo abogado, Ignacio Nicolás, una médica Maira Luba, y una tercer hija que estudia ciencias económicas, Sabrina María Constanza”, dice orgulloso. Son ellos también quienes les han brindados sus mayores momentos de felicidad y ha sido su esposa su soporte durante toda su vida y Carlos lo cuenta agradecido: “El trabajo es para mí es una motivación y se lo debo principalmente a mi esposa que me ha acompañado, me ha soportado y me ha ayudado a hacer lo que me gusta, lo que sea, porque he podido elegir y siempre ha estado ahí”.

Carlos estuvo cerca de Fenaomfra desde el principio, sin embargo, se sumó a la comisión directiva recién en el 2011 y desde entonces se ha desempeñado como secretario de Federación.

¿Qué significa ser un dirigente?
Fenaomfra se fundó en el ´87, en ese momento mi hija estaba por nacer, aún no era abogado. Yo fui secretario de la fundación, quizá podría haber formado parte de la comisión directiva pero creo que no estaba maduro. En muchos casos intervine como asesor. En el 2011 el presidente de la federación, De Biase, me dijo que quería desarrollar un tema que le parecía muy importante que es de las enfermedades crónicas no trasmisibles. Terminamos viajando a Nueva York, y yo fui como prosecretario de la federación. Volví muchos años después.

Para mí, ser dirigente me arrastra desde la fundación. La Federación nace de charlas con gente del mercado y de la idea de que muchas de las cosas que nos pasaban venían impuestas desde  Buenos Aires y de que todos juntos podíamos lograr mejoras para los mercados. Muchas de las cosas que hagamos seguro serán criticadas o criticables pero también hay muchas otras que marcarán un camino.

¿Cuáles considera fueron los mayores logros de la Federación en estos últimos años?
Los logros es que empezamos a convertir a la Federación en un actor preponderante a nivel nacional. Haber logrado un convenio con Ministerio de Salud de la Nación; con algunos actores internacionales que nos siguen convocando para desarrollar pautas que están en sus convenios, como el knowhow para la comercialización frutihortícola; la instrumentación de un medio de comunicación, como lo es Comunidad Fenaomfra.

Con el tiempo, empezamos a descubrir que no necesitamos que terceros digan las cosas por nosotros, que los mismos operadores pueden ser artífices de las cosas que quieren transmitirles a sus colegas y que no hay que romper ningún molde para trasmitir las cosas que viven día a día, que se puede trabajar en perfeccionar continuamente la producción y el funcionamiento de los mercados y no sólo dedicarse a abrir y cerrar las puertas del mercado. Yo creo firmemente que el que no se equivoca es porque no está haciendo nada.

¿Cuáles cree que son las fortalezas y debilidades del sector?
Una fortaleza principalísima: vende alimentos escasamente modificados tratados con Buenas Prácticas Agrícolas. Otra es que la gente tiene que comer y tiene necesidad de consumir alimentos que sean sanos, que mejoren su calidad de vida, aún le queda desarrollarse por lo cual esta fortaleza se convierte en una oportunidad.

Debilidades: el individualismo, la concepción de que el negocio siempre se hizo así y hay que seguir igual y la falta de herramientas de comercialización que no se incorporan (falta de información, utilización de redes, estrategias de marketing), que habría que tener en cuenta para poder seguir avanzando.

Como decía Ortega y Gasset “el hombre soy yo y mis circunstancias” y mis circunstancias me modifican, me varían y eso es lo que pasa con la gente del mercado. Una resistencia al cambio es natural, ahora la persistencia al cambio se transforma en un retroceso.

¿Si no trabajara de esto, que le hubiera gustado hacer o ser?
Si no existieran las matemáticas en medicina, creo que me hubiera dedicado a la medicina. Las únicas matemáticas que entiendo son las que están relacionadas a la rentabilidad. No me gustan para nada, siempre fui muy mal alumno y gracias que llegue a abogado.

¿Cuál es su idea de la fidelidad?
Creo que soy un tipo fiel, para mi es importante. Es un valor trascendente en todo sentido y no solamente desde los sexos opuestos si no también con los amigos, el trabajo. Esto no implica resignar posiciones personales, sino complementarlas con otros. Pero es importante mantener la fidelidad y la trascendencia que tiene en la vida de las personas y de la conformación de la personalidad.

¿Qué le hace reír?
En general disfruto mucho de un buen chiste, una buena película, creo que he visto cuatro veces Las aventuras del joven Frankestein. Lo que más me hace reír es compartir con mis hijas, hacerles bromas, molestarlas. Asumo que todas las mañanas hay que ser optimista por lo que me levanto de muy buen humor porque hay muchas cosas por hacer. A partir de eso, es mucho más fácil encontrar de qué reírse. Además, admito que uno tiene que aprender a reírse de uno mismo.

¿Cuál es su virtud más valorada?
(NDE: Antes de contestar, se queja, dice que es una pregunta incómoda y que eso deberían contestarlo los otros. Ante la insistencia, contesta).

Capaz que ser amigo. Soy fiel. La amistad y la fidelidad tienen mucho que ver.

¿Qué talento desearía tener?
Me gusta mucho la música, me hubiera gustado aprender a tocar algún instrumento. Aprendí mucho de la música de mi época, del rock sinfónico de LedZeppeling, de Pink Floyd de Sui Generis, entonces dice que lindo tocan, que virtud que alguien le pueda sacar estos sonidos a un instrumento. Me gustaría haber tocado la guitarra o el piano.

¿Cuál es el defecto que más odia de usted mismo?  ¿Y en otros?
Que a veces no controlo las reacciones, trabajo bastante en eso. Y el otro que necesito tener control y estar en control. En el resto, una de las cosas que más me molesta es que no sean fieles, otra de las cosas es que no hagan las cosas en el tiempo que uno espera, sabiendo que hay capacidades distintas, que no le pongan el corazón a lo que hacen.

¿Tiene algún héroe o algún personaje actual o histórico al que admire?
Un héroe de verdad mi papa. Trabajó toda su vida hasta que murió a los 44 años. Él cambiaba, nos mudamos 19 veces siempre buscando cosas para hacer, siempre trabajando y siempre con absoluta fidelidad. Se intoxicó con benceno trabajando en una veterinaria porque no estaba trabajando en las condiciones de seguridad necesarias. Por eso años no existían ART ni nada. Se pescó un tipo de anemia que invertía la medula espinal que el lugar generar de glóbulos rojos, los fagocitaba. Y podría haber demandado y terminado sus días con dinero. Pero no demandó nunca a nadie. No podía ver a los abogados y ni si quiera se iba a acercar a uno. Además porque el que le había dado trabajo había sido un amigo y el consideraba que lo había ayudado a mantener a la familia. Y otro héroe personal mío es Cristo.