Política Sectorial
Naciones Unidas aprobó la Declaración de Derechos Campesinos
|Ginebra|
Con 33 votos afirmativos, 11 abstenciones y 3 votos en contra, el Consejo de DDHH de la ONU aprobó la Declaración de Derechos Campesinos en una sesión histórica para la actividad rural de todo el mundo. Ahora deberá ser tratada en la Asamblea General de Naciones Unidas a realizarse en noviembre de este año en Nueva York.
En caso de ser ratificada, la declaración será un instrumento en defensa de las millones de personas que viven en zonas rurales y encuentran postergados sus derechos fundamentales como el acceso a la tierra, al agua, a las semillas, a la biodiversidad y al precio justo de su producción para vivir dignamente. Además, el documento buscará reconocer la importancia de trabajar por la Soberanía Alimentaria de los Estados.
Con esta primera aprobación se cumplen las previsiones de La Vía Campesina (LVC) -una organización que reúne a 148 organizaciones rurales del mundo- quien había adelantado el apoyo mayoritario que tendría el documento.
El antecedente más inmediato del texto es del año 2012, cuando el Consejo de Derechos Humanos creó el grupo de trabajo intergubernamental para redactar la Declaración recientemente aprobada. Por aquel entonces la presidencia quedó a cargo del Estado boliviano, que asumió con gran compromiso el desafío. El primer borrador tomó como base la propuesta de Vía Campesina, pero fue incorporando diversos aportes de los Estados y organizaciones de la sociedad civil involucradas. Finalmente, la versión definitiva llegó seis años después.
Esta noticia genera expectativa a nivel mundial y tiene un impacto particular en Argentina. En los últimos meses, el gobierno de Mauricio Macri ha sufrido intensas manifestaciones contra el vaciamiento de la Secretaría Agricultura Familiar, de donde fueron despedidos más de 400 trabajadores en diversos puntos del país.
En el mismo sentido, el ministerio de Agroindustria conducido por Luis Miguel Etchevehere decidió disolver el Monotributo Social Agropecuario, una herramienta que permitía formalizar la actividad de pequeños agricultores, garantizando además el acceso a la salud (obra social), aportes jubilatorios y la posibilidad de facturar.
En ese contexto, la noticia entusiasma a los sectores campesinos que históricamente luchan por el reconocimiento de sus demandas más fundamentales. “Ya es una herramienta que muestra un horizonte de políticas públicas de la esperanza”, expresó en su muro de Facebook Diego Montón, del Movimiento Nacional Campesino Indígena (MNCI).
