Producción
Limones tucumanos: Mal clima, poca calidad y sobreoferta de mercadería
|Tucumán|
En los últimos días, la localidad de Las Talitas (al noroeste de San Miguel de Tucumán) fue noticia nacional. ¿El motivo? Imágenes que mostraban un terreno baldío repleto de limones desechados ante la imposibilidad de exportarlos o colocarlos en el mercado interno.
Los problemas comenzaron tiempo atrás, durante los meses de marzo, abril y mayo donde sostenidas precipitaciones (con milimetrajes récords para la época: más de 2000 milímetros, muy por encima de los 1200 a 1500 mm que suelen darse en ese período) afectaron la campaña citrícola y retrasaron la cosecha. Se estima que en total se perdieron 45 días de trabajo.
Mucha de esa fruta no cosechada quedó en las plantas y, ante la considerable cantidad de agua absorbida, los frutos crecieron por encima del calibre que requieren los exigentes mercados internacionales por lo que fueron rechazados en los empaques. Además, es fruta que se pasó de madurez y color; un limón que ya no sirve para la venta en fresco. Pero, ¿qué sucede con la industria? Algo similar. Su tamaño más grande de lo normal “los quitó del circuito”, según afirmó Pablo Padilla, presidente de la Asociación Citrícola del Noroeste Argentino (ACNOA).
En el mes de abril de 2018 Argentina logró la apertura del mercado estadounidense tras 17 años sin exportar a dicho país. Los limones son, actualmente, el “caballito de batalla” del gobierno nacional, ya que durante su gestión fue el producto frutihortícola que más puertas abrió en el mundo: a Estados Unidos se sumaron India, Japón y México.
El ingeniero Hernán Salas de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC) explicó que el descarte se debe, en gran parte, al cuidado de estos recientes acuerdos. “Por ejemplo tenemos mercado en Estados Unidos, donde los niveles de exigencia en cuanto a calidad son bastante altos. Esto nos lleva a descartar mucha fruta en los empaques para poder poner en caja la fruta que realmente es la demandada, y no de menor calidad, de manera de poder conservar un mercado que nos costó tanto conseguir”.
Por otro lado, Salas aclaró que si bien “con este período lluvioso se han empezado a notar síntomas de distintas patologías como melanosis, cancrosis, algo de fitoftora” por ahora "la sanidad está controlada".
Para tener una idea de la cantidad de limónes, les comparto una foto que saqué ayer, con @JoseInesta como referencia, quién en ese momento hablaba por teléfono. Y que dicho sea de paso, es un defensor acérrimo de ponerle limón a la empanada y a las milanesas. pic.twitter.com/GLo9zqkIkj
— Isaias Cisnero (@IsaiasCisnero) June 14, 2019
Complicada la exportación por falta de calidad y con un mercado interno sobreofertado, aparece la industrialización como una opción potable para colocar la mercadería. Sin embargo Padilla explicó que, por el retraso de la cosecha y el paro de transporte que afectó a la provincia durante 15 días, se produjo un cuello de botella y la fruta “salió toda de golpe” por lo que las industrias de Tucumán, Salta y Jujuy no tienen capacidad para procesarla en su totalidad. A esto se suma que muchas empresas todavía están tratando su propia fruta. Por lo tanto, las expectativas de los productores están puestas en que las industrias reactiven la demanda.
En una nota con Radio Colonia, José Carbonell, presidente de la Federación del Citrus (Federcitrus), dijo que el sector limonero venía "de un 2018 con una cosecha importante y una producción superior a la media" y que en "en la industria ya había quedado stock", lo cual explica también dicha saturación. Por otro lado, afirmó que "si la fruta no se cosecha, cae y se pudre, generando un foto séptico al pie de la planta". Por lo que las autoridades provinciales de medio ambiente se encuentran trabajando "para disponer esta fruta que no tiene otro destino”.