Más de 1 millon de personas fueron asistidas por los Bancos de Alimentos

|Argentina|

Generalmente el trabajo que realizan los mercados frutihortícolas en nuestro país va acompañado de un gran aliado: Los Bancos de Alimentos. Estas instituciones trabajan en conjunto para potenciar sus objetivos y fortalecer el funcionamiento de la economía circular. Dicho vínculo se da principalmente porque los mercados son grandes generadores de residuos orgánicos y estos muchas veces son alimentos que se encuentran en buen estado para ser consumidos por un gran número de familias argentinas.

Así como los mercados tienen una larga historia como abastecedores en nuestro país los bancos también tienen la suya. En nuestro país la Red Argentina de Bancos de Alimentos fue creada en 2003 como una iniciativa propia de los bancos para potenciar el trabajo que individualmente hacían. Entre los objetivos que se proponen los bancos de alimentos se encuentra reducir el hambre, la malnutrición en el país y el desperdicio de alimentos que puedan ser rescatados antes de que sean desechados o estén en mal estado.

La Red formada en 2003 permitió construir una alianza que se fue fortaleciendo con los años y que hoy agrupa a más de 25 bancos a nivel nacional que se encuentran distribuidos en 15 provincias. A eso se le suman las entidades privadas y públicas que trabajan de manera articulada, y los voluntarios que constituyen la columna vertebral de estas organizaciones.

Foto: Distribución de Bancos de Alimentos y organizaciones (Redbda).

En estos meses, durante la pandemia, los Bancos de Alimentos continuaron su funcionamiento. Incluso su rol se acrecentó debido a la emergencia alimentaria que enfrentó gran parte de nuestra sociedad y a la imposibilidad de adquirir alimentos sanos y de calidad. La demanda hacia los Bancos aumentó considerablemente por parte de las personas y de instituciones que atraviesan aun hoy un proceso de crisis agudo.

“Los Bancos de Alimentos tuvieron una respuesta rápida y eficiente ante la pandemia. Tuvieron que adaptarse creando protocolos de trabajo, no solo para rescate sino para la distribución de alimentos. No fue una tarea sencilla porque hubo que restructurarse, algunos tuvieron que cerrar sus puertas y tuvieron que reducir la cantidad de voluntarios que trabajaban. En 2019 estábamos atendiendo alrededor de 500 mil personas y este año por la crisis llegamos a atender a un millón y medio de personas a través de comedores o merenderos”, explicó a InterNos Fernando Mendoza, director ejecutivo  y vocero de la Red Argentina.

De los 25 Bancos de Alimentos que forman la Red a nivel nacional, 15 rescatan alimentos dentro de los mercados mayoristas de frutas y verduras. Esta acción tiene una gran importancia debido al valor nutricional de los productos que se obtienen. A causa de la pandemia y por la reducción en el número de voluntarios, realizar tareas dentro de los mercados este año fue un tanto más complejo para los Bancos de Alimentos. Como alternativa se hicieron guardias en los concentradores para llevar adelante los rescates, ya que no podían concurrir a diario como antes.

Con el paso de los meses las actividades dentro de los abastos se fueron normalizando, pero aun hoy se lleva a cabo de manera pausada. En relación a esto último, Mendoza dijo: “Todavía es muy difícil garantizar la seguridad de los voluntarios, entonces preferimos mantener en suspenso esa actividad hasta que la situación mejore un poco más. A pesar de eso tuvimos casos en que los mismos puesteros de los mercados se encargaron de recolectar los alimentos y llevarlos personalmente al banco. Eso  sucedió en el Mercado de Santa Fe  donde un puestero con su propia camioneta llevaba los alimentos y así evitó que se desperdiciaran miles de kilos de frutas y verduras”.

Si hacemos referencia a los volúmenes de alimentos recuperados y distribuidos por los Bancos de Alimentos, las cifras son realmente abultadas. En el 2019, de acuerdo a los últimos registros de la Red de Bancos de Alimentos, se lloraron entregar  más de 13 millones de kilos de alimentos en todo el país. Esto se realizó a través de 3.484 entidades que beneficiaron a 496.077 personas. Durante el 2020 los Bancos superaron los 25 millones de kilos de alimentos que incluyeron diferentes rubros e industrias.

Uno de las acciones más significativa que realizó este año la Red fue el rescate humanitario de papas. Este proceso se llevó a cabo desde marzo a septiembre  y en ese operativo se lograron entregar más de 10 millones de kilos en todo el país. “La empresa McCain nos donó esa cantidad de papas  y a través del Banco de Alimentos de Balcarce  los distribuimos en todo el país.  Dos millones y medio de kilos los hicimos por todo el sistema de Bancos de Alimentos, otros dos millones y medio los distribuimos a través de ONGs o  Asociaciones Civiles y el resto se articuló con municipios, sobre todo de la provincia de Buenos Aires. Ese trabajo fue gracias a más de 15 mil voluntarios que se sumaron a esta cadena solidaria, desde la cosecha, los camiones y hasta el destino”, manifestó el representante de la Red.

Centro Hortícola Solidario

Otra de las iniciativas llevadas adelante por la Red de Bancos de Alimentos durante la pandemia, fue la creación del entro Hortícola Solidario en Sierra de los Padres. El mismo se formó por iniciativa de los Bancos de Alimentos de Mar del Plata, Tandil y Balcarce con el objetivo de incentivar el rescate de frutas y verduras a gran escala.

“La cuarentena fue complicando un poco el plan original que teníamos. Recién en octubre terminamos firmando el contrato  con la Sociedad Rural de Mar del Plata para el uso del predio,  el primero de noviembre tomamos posesión de ese espacio y ahí empezamos a hacer los primeros rescates de frutas y verduras”, explicó Fernando.

De acuerdo a lo que contó a este medio el vocero de la Red, hasta el momento desde el centro hortícola se lograron rescatar unos 24 mil kilos de alimentos en octubre y 18 mil kilos en noviembre. A paso lento pero firme, los Bancos de Alimentos bonaerenses se proponen rescatar 40 mil kilos mensuales de frutas y verduras durante esta primera etapa. Por el momento los productos de mayor volumen obtenidos son papas, cebollas, batatas, zanahorias, lechuga, entre otros.

Vale la pena recordar que el proyecto del centro hortícola se propone trabajar en conjunto con todas las cadenas productivas de la zona. Para eso reciben donaciones de alimentos tanto de productores como de industrias, que luego son clasificadas y entregadas a quienes componen el  Consorcio de Bancos de Alimentos Mar y Sierras para su posterior distribución. “Hasta el momento abastecemos a 250 comedores. La idea es seguir creciendo y ayudando a las entidades que lo necesitan. Además queremos mejorar el valor nutricional de los productos que se están entregando”, dijo el Director Ejecutivo.

También el centro hortícola cuenta con un espacio donde trabaja el INTA y la Facultad de Ciencias Agrarias y la Regional Mar del Plata. Estas instituciones lo que hacen es brindar formación, realizan tareas de extensión e investigación. Como planes a corto plazo, pretenden llevar adelante cultivos experimentales y ensayos para potenciar la actividad de los técnicos de INTA. Lo cultivado en esos ensayos además será destinado a los Bancos que forman parte del Consorcio Mar y Sierras.