Política Sectorial
Buscan bajar la presión impositiva sobre la actividad de peras y manzanas
|Neuquén - Río Negro|
En el día de ayer, diputados de la Legislatura neuquina se comprometieron -por unanimidad- a elevar hacia el Congreso nacional la discusión sobre los costos laborales y la carga fiscal que pesa sobre la producción regional de peras y manzanas.
Sebastián Hernández, presidente de la Federación de Productores de Fruta, expuso previamente sobre el impacto que tiene para chacareros y empresas la presión impositiva sobre esta actividad de carácter intensivo.
“Cuando se da la discusión en torno a la presión impositiva tratan igual a una Economía Regional que genera mano de obra directa e indirecta, que a un campo que tiene un empleado cada 500 hectáreas. Nosotros tenemos un empleado cada dos hectáreas”, describió Hernández.
“Hoy con buen tino la Legislatura trató el proyecto de comunicación donde van a insistir a nivel nacional con diferimientos para las provincias de Río Negro y Neuquén”, dijo en conversación con el medio Agrovalle.
Entre sus fundamentos se señala que, entre ambas provincias, existen unas 40.000 hectáreas dedicadas a la fruticultura -además de manzanas y peras, uvas, ciruelas, duraznos y cerezas-. La actividad abarca dos mil productores que a su vez emplean de manera directa e indirecta (trabajos en chacras, empaques, frigoríficos, entre otras tareas) a unas 75.000 personas.
“Ya hemos llevado la discusión a nivel nacional. Y siempre se nos responde lo mismo: que gracias a la presión impositiva tenemos salud gratuita, educación gratuita. Y está bien. Pero hoy nuestra actividad tiene un sobrepeso de impuestos. Lo que pedimos es una diferenciación por el tipo de tarea intensiva que hacemos”, agregó Hernández.
“Entendemos que hay que pagar impuestos y que eso conlleva beneficios para todos. Pero cuando miras los valores reales de la actividad, te das cuenta que el Estado se lleva más del 50% de lo que uno produce, contando la totalidad de los costos. Así no hay economía que aguante”.
Según Hernández, el 65% de los costos del sector productivo son laborales, incorporados en cargas sociales y otros ítems de la contratación. “De cada dos empleados, le estoy pagando uno al Estado”, expresó.
“El productor cada vez que tiene algo de plata lo invierte en la chacra. Y lo que no tiene también, porque se endeuda para seguir trabajando. Si eso no es un condicionante para tratar de mejorar la calidad buscando oportunidad de bajar los costos, la verdad que ya no se entiende”, cerró.