Comercialización
Luego del fallo en Santa Fe, un diputado entrerriano exige mayores controles en los mercados de abasto
|Entre Ríos|
El reciente fallo que obliga a la municipalidad de Rosario y a la provincia de Santa Fe a intensificar los controles sanitarios en los mercados mayoristas de frutas y verduras tuvo repercusión en la provincia de Entre Ríos. Eduardo Solari, diputado provincial por la UCR Paraná, solicitó al poder Ejecutivo Provincial que disponga de los medios para fiscalizar la mercadería que proviene de Santa Fe, como también la que se produce dentro del ejido local.
Luego del fallo emitido por la jueza Verónica Gotlieb, perteneciente al juzgado civil y comercial N°13 de Rosario (Ver caso), el diputado radical sostuvo que “el gobierno entrerriano debe avanzar en igual sentido, coordinando acciones interjurisdiccionales y diseñando y aplicando un protocolo propio para llevar adelante controles y sanciones a los fines de evitar que la ciudadanía ingiera alimentos con distintos tipos de tóxicos".
En el mismo sentido, el también vicepresidente del Comité Provincial de la UCR recordó que un gran porcentaje de la mercadería frutihortícola de Santa Fe es comercializada y consumida en Entre Ríos. "Es necesario que los entrerrianos sepamos lo que estamos comiendo y que saquemos los agrotóxicos de la comida. A nivel gubernamental, el Ejecutivo provincial tiene una oportunidad por delante si avanza prontamente con la reglamentación de la Ley de Agroecología sancionada el año pasado", determinó Solari.
Cada vez que se suceden declaraciones de este tipo en los medios de comunicación, los mercados concentradores de frutas y verduras quedan en la mira. Consultado por Revista InterNos, el dirigente del mercado El Charrúa (Paraná) Daniel Brandolín, consideró que si bien coincide en el espíritu con la mirada de Solari, las expresiones utilizadas “sólo generan preocupación en la gente, le hacen sentir a las personas que están comiendo frutas y verduras contaminadas”.
Días atrás la gerente del Mercado de Concentración de Fisherton, Marcela Sisino, también se había pronunciado a favor de los controles, pero cuestionó que los mismos se centraran únicamente en los Mercados de Abasto. “Estamos completamente de acuerdo en que se tienen que llevar a cabo controles sanitarios, pero la trazabilidad debe comenzar en la zona de producción para que efectivamente se eviten daños en el consumidor”, sostuvo.
Sisino opinó que los controles deben realizarse primero en las quintas a través de las autoridades de Senasa, para que luego la mercadería llegue al abasto con un documento que permita leer la trazabilidad del producto, garantizando que el mismo ingrese en las condiciones sanitarias exigidas para la venta.
En el mismo sentido se expresó Brandolín, de Paraná: “Considero que están bien todos los controles necesarios para que comamos sano. Pero debería ser parejo, no solamente para la gente del mercado. Hay muchos puestos clandestinos, mucha mercadería que se vende por otras vías, y que nadie controla”, analizó. Y agregó a continuación: “Sería interesante que se puedan coordinar los controles. El Estado a través de Senasa, junto con los Mercados y los productores. Y por supuesto, que se insista en la capacitación, que es fundamental”.
Si bien en Entre Ríos la medida es por ahora una expresión de deseo, en Santa Fe los controles ya comenzaron y los resultados obtenidos deberán informarse mediante un portal web de acceso público. Los análisis se realizarán con el asesoramiento de la Facultad de Química de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y las multas podrían alcanzar los 50 mil pesos.