Así son los microcréditos de la UTT para acompañar a los floricultores golpeados por la pandemia

|La Plata|

La pandemia y el aislamiento social obligatorio golpearon con fuerza a los sectores florícola y viverista de La Plata. A diferencia de la frutihorticultura, que con dificultades y protocolos sanitarios estrictos pudo continuar con el abastecimiento, en estas actividades se produjo un cierre masivo de los mercados donde habitualmente se comercializan flores y plantas.

Ante esta coyuntura, la Unión de los Trabajadores de la Tierra (UTT) ofreció microcréditos a los afectados para que puedan convertir parte de sus quintas hacia la producción de verduras agroecológicas y mantenerse en el circuito comercial, con ingresos que les permitan continuar su trabajo a campo.

“Ni bien empezó la pandemia los mercados mayoristas de flores cerraron y se generó una crisis importante porque había muchas flores a punto de ser cosechadas. Muchas familias que habían puesto allí toda su inversión, familias que en muchos casos alquilan la tierra, comenzaron a tirar esa mercadería”, contó a InterNos Rosalía Pellegrini, miembro de la Coordinación Nacional de la UTT.

¿En qué consisten estos microcréditos? La propuesta de la organización, hasta hace poco conducida por Nahuel Levaggi -hoy presidente del Mercado Central de Buenos Aires- es otorgar 15 mil pesos a las familias interesadas, con un acuerdo de trabajo para producir verduras agroecológicas en los próximos meses. Al efectivo se sumará el acompañamiento técnico del Consultorio Técnico Popular (COTEPO), un área específica de la UTT formada para los trabajos a campo en los proyectos de transición agroecológica.

El crédito se otorgará con fondos propios de la organización y será devuelto no en dinero sino en verdura, la cual se comercializará en los distintos canales que posee la organización, desde ferias populares hasta almacenes de ramos generales. “Se trata de un proyecto piloto, una manera de demostrar que este tipo de acciones pueden llevarse adelante”, dice Pellegrini a InterNos. Pero agrega: “Nosotros no somos el Estado, esto es pura autogestión. Ojalá sirva para que en algún momento esto pueda convertirse en política de Estado, y esté destinado a productores sean o no de la organización”.

En los últimos días, el rubro florería fue uno de los que se habilitó nuevamente para la atención al público con estrictos protocolos sanitarios. Le preguntamos a Rosalía Pellegrini si esto cambiaba o condicionaba la situación del proyecto. “Es una buena noticia que hayan abierto las florerías. De todas formas, por la cuarentena durante largo tiempo no va a haber fiestas, casamientos ni un montón de eventos que son el grueso de la demanda de flores en la región. Aunque abran los mercados las ventas van a caer muchísimo”, explica.

Claro está que no se trata de un préstamo convencional. El monto es considerablemente menor al que ofrecen entidades bancarias, casi simbólico, pero también son flexibles las condiciones puestas por la organización para su reintegro. El trabajo está orientado por un profundo compromiso con la producción agroecológica y por la solidaridad entre colegas en un momento difícil.