Comercialización
¿Qué año le espera a la Vitivinicultura nacional?
|Argentina|
Tras un 2021 con cifras récord en exportaciones, el sector se prepara para un año signado por una producción menor, precios más altos y un mercado externo aún incierto. El presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Martín Hinojosa, dialogó con Télam y dejó algunas precisiones sobre la situación del sector.
En primer lugar, Hinojosa resaltó que las exportaciones siguen en alza, aunque supeditadas a la resolución del conflicto armado en Europa Oriental. Si la invasión se prolonga podría haber consecuencias, principalmente relacionadas al aumento de los combustibles y los gastos en flete.
Hinojosa explicó que Rusia solamente acapara el 2% o 3% de la producción exportable de vino argentino. Pero estos vinos deben competir con los de los países vitivinícolas europeos (España, Grecia e Italia), y si estos deciden colocar sus productos a precios más competitivos el vino nacional podría perder lugar en el mercado europeo.
Pese a que el futuro exportador es aún incierto, para Hinojosa “estamos vendiendo más y más caro” gracias a la valorización de las marcas vitivinícolas argentinas.
Producción: bajó el volumen, pero se mantuvo la calidad
El presidente del INV sostuvo que la producción de 2022 fue un 13% menor a la del año pasado, pero consideró que la calidad de la cosecha fue muy buena. Advirtió que el menor volumen de uva podría generar un “recalentamiento” en los precios.
Aunque los valores dependen de la uva y la zona, la escasez del fruto con destino a vino incidió en un aumento generalizado de precios. Los productores también venían impulsando reclamos para lograr un precio más justo por la uva, molestos por el destrato del sector bodeguero.
Al ser consultado por Télam, el empresario se pronunció sobre el consumo interno. Remarcó que Argentina tiene un mercado interno muy fuerte, que permite la proliferación de los pequeños productores. Dijo que el volumen de ventas dependerá de los valores que se manejen en el vino a granel, un mercado al que categorizó como “infiel”. “Con bajo precio se vende muchísimo, y con precio normal cuesta un poco más vender”, precisó Hinojosa.
El apoyo del sector público en la vitivinicultura
Hinojosa celebró la quita y la reducción de retenciones para los pequeños productores, que también fueron beneficiados por el incremento de los reintegros de exportación. Calificó de “históricos” los reclamos y manifestó: “Está bien que el sector pida esfuerzos al Estado nacional, pero tiene que reconocer que los ha hecho; gran parte de los exportadores dejó de pagar o paga la mitad”.
Asimismo, se refirió a la mejora en el financiamiento que significó la implementación del Proyecto de Desarrollo Sostenible de la Cadena Vitivinícola II (Proviar II). Se trata de un préstamo de US$ 40 millones, financiado por el Banco Internacional de Desarrollo (BID), destinado al desarrollo sostenible de la cadena vitivinícola.
Uno de los ejes de este proyecto es mitigar el impacto de la crisis hídrica para los productores, uno de los pedidos más resonantes del último desayuno anual de la Coviar. En relación al otro punto central, la comercialización, Hinojosa apuntó: “La pandemia nos dio también la razón de que cuando se vende y exporta más, los stocks se equilibran, la cadena empieza a funcionar un poco mejor y en forma más justa”.