El clima provocó aumentos para la lechuga, la papa y el tomate

|Argentina|

El informe de Alimentos Frescos Argentinos (ALFA) para la semana 7 del año señaló el aumento de varios productos, algunos ligados a la situación climatológica. Es el caso de la papa, el tomate y la cebolla.

La papa cerró la semana con un precio mayorista de $153,93. Las lluvias causaron complicaciones en la comercialización del tubérculo, que aumentó cerca del 8%. En comparación con el año pasado, la papa sufrió, a valores constantes, un incremento del 257%. Esta semana los lotes llegaron de General Belgrano, Buenos Aires.

La lechuga también padeció problemas climáticos y tuvo una suba del 15%. La poca oferta de la verdura en los mercados provocó el aumento de precios en todas las variedades. Una de las zonas más afectadas fue la de Mar del Plata, donde el granizo impactó gravemente en los cultivos de hojas verdes. “La lechuga quedó triturada” explicó en esta nota el presidente de la Asociación de Productores Frutihortícolas de General Pueyrredon. El precio mayorista para la lechuga se ubicó en torno a los $260.

El tomate se lleva el podio…

El tomate se lleva el podio de los aumentos de la semana. Las altas temperaturas provocaron una temprana maduración de los productos y una suba en todas las variedades. El aumento de esta hortaliza se ubica cerca del 55%. Recordemos que la semana anterior a esta, el precio había bajado casi un 25%.

La zanahoria, proveniente de Mendoza y Mar del Plata, también tuvo un ligero incremento en su precio. La poca oferta de esta hortaliza provocó una suba del 8%, que llevó el precio mayorista a los $120.

La cebolla se mantuvo estable respecto a la semana anterior. Los aportes de Cuyo y la cosecha nueva del sur de Buenos Aires lograron satisfacer a la demanda. Sin embargo, la diferencia de precios respecto al año pasado es abrumadora: la cebolla aumentó un 263% respecto al 2022, siempre a valores constantes. Esta semana cerró con una cotización de $107 al por mayor.

Las frutas, por su parte, mantuvieron una relativa estabilidad e incluso algunos precios mostraron una tendencia a la baja. Por ejemplo, la pera tuvo un descenso en su precio del 11%. Nuevos lotes con frutas más pequeñas traccionaron una baja en la cotización promedio. El precio mayorista fue de $149 para esta semana. La producción de pera, que a principios de mes había sufrido el granizo en el Alto Valle, es una de las economías regionales en crisis, según el semáforo publicado por el CONINAGRO.

La banana exhibió un ligero incremento del 6% en su cotización. Este aumento fue generalizado en todas las presentaciones comerciales. La fruta, proveniente principalmente de Ecuador pero también de Bolivia, Paraguay, Colombia y Brasil, alcanzó un precio mayorista de $195.

La cotización de la manzana bajó gracias al ingreso de lotes de Gala y Galaxy. Estas variedades se vendieron a un precio menor y arrastraron hacia abajo la aún elevada cotización de la manzana. A valores constantes, esta semana la manzana fue 176% más cara que en el 2022. Su precio mayorista se ubica en los $376.

Los cítricos por su parte no mostraron grandes variaciones en sus cotizaciones. La naranja cerró la semana con un precio de $164, apenas un 3% más que la semana anterior. De nuevo, el aumento interanual de esta fruta supera los 200 puntos: a valores constantes, la naranja cuesta 219% más que en 2022.

La mandarina, que no es muy demandada en esta época del año, mantuvo una cotización estable. Su precio mayorista se ubicó cerca de los $105, igual que la semana anterior.

El limón se comportó de manera similar. La oferta de lotes de calidad comercial, empujaron la cotización promedio hacia abajo y generaron estabilidad. No hubo un aumento significativo y cerró la semana con un precio mayorista promedio de $165.

Es importante mencionar que el sector citrícola experimenta una fuerte crisis producto de la sequía, y si bien hay buenas noticias, como el primer cargamento de cítricos dulces que partió a la India, los productores citrícolas están advirtiendo hace tiempo que la cosecha no será óptima. Entre otras cosas, señalan que la cosecha se retrasará y que el tamaño de la fruta será mucho más chico, lo que traerá problemas para su comercialización.

Leer informe completo: 07 Alfa Informe Semanal F&H 20230217